No todos los días o semanas serán de crecimiento.
En esto que llamamos emprender, al menos en mi experiencia ha habido momentos de crecimientos, estrés, movimiento y un millón de cosas a la vez. Pero también he tenido momentos de tranquilidad, reflexión y mantenimiento.
Creo que cuando estamos creciendo, es cuando mas nos sentimos agobiados o que tenemos muchas cosas por hacer. Por lo general te sientes abrumado o no encuentras la manera de como vas a poder con todo.
Pero existe el lado opuesto, cuando no necesariamente estas en constante movimiento o al menos no lo percibes ya que estas pasando por un momento de estancamiento o "de reflexión" como le llamo yo.
Estos momentos o etapas son sumamente importante ya que son clave para poder observar y realmente analizar la dirección de tus acciones, lo que funciona y cosas que no quieres volver a repetir.
En el negocio nosotros creemos que hay una linea base de acciones con las que tienes que cumplir semanalmente para que todo opere en orden. En momentos de crecimiento esta linea base es la que te mantiene a no perder el enfoque y en momentos de reflexión es cuando puedes aumentar un poco cada vez la linea para siempre estar mejorando.
Actualmente estamos en un momento de reflexión, a veces me dejo llevar y pienso que no estamos mejorando, que estamos estancados pero es importante recordar que siempre habrá de estos momentos al emprender, los dos son de valor hay que saber disfrutar y recordar que solo son momentos.